El Banco Mundial aprobó una subvención de US$6,3 millones para ayudar a los países del Caribe oriental a conservar y fortalecer la resiliencia de sus recursos costeros y marinos, así como implementar políticas de carácter regional para estimular el crecimiento azul. Esto les permitirá a estos países gestionar mejor su infraestructura natural, que es la primera línea de defensa ante las mareas de tormentas y los daños resultantes de una mayor frecuencia de eventos climáticos extremos, como los recientes huracanes. El proyecto Entorno Oceánico Regional para el Caribe será implementado por la Comisión de la Organización de los Estados del Caribe Oriental (OECS) en estrecha colaboración con sus Estados miembro.
“Este proyecto apoyará a los diseñadores de políticas del Caribe oriental en la identificación de políticas inteligentes tendientes a aprovechar el océano y sus activos naturales, así como a estar preparados para una transición exitosa hacia una economía azul y un ‘crecimiento azul’ socialmente equitativo”, dijo Tahseen Sayed, directora del Banco Mundial para el Caribe. “Dado que la región ha sido seriamente afectada por los recientes huracanes, es igualmente importante desarrollar la resiliencia de sus comunidades costeras y promover el desarrollo sostenible de los recursos oceánicos”.
De acuerdo al informe del Banco Mundial, “Hacia una economía azul: una promesa de crecimiento sostenible para el Caribe”, el mar Caribe generó US$407 mil millones en valor agregado en 2012, incluidos países continentales con costa sobre el mar. El mar Caribe cubre una superficie de 2,75 millones de kilómetros cuadrados y es un recurso clave para los 40 millones de personas que viven sobre sus costas. Los países de la OECS juegan un papel fundamental en la gobernanza oceánica regional dado que dependen en gran medida de sus ecosistemas costeros para sus ingresos, puestos de trabajo, salud y bienestar. Al mismo tiempo, el desarrollo mal planificado representa una amenaza para las comunidades locales, dado que erosiona las protecciones naturales tanto costeras como marinas, así como otros activos oceánicos naturales importantes.
“Este proyecto respalda la implementación de la Política Oceánica Regional para el Caribe oriental, una política integral avalada por todos los jefes de Estado de la OECS. Esta iniciativa expone una visión a largo plazo para asegurar la salud futura de los espacios oceánicos mientras se obtienen sus riquezas de una manera sostenible”, dijo Sylvia Michele, especialista en Medio Ambiente del Banco Mundial.
El proyecto Entorno Oceánico Regional para el Caribe apoya a Dominica, Granada, San Cristóbal y Nieves, Santa Lucía y San Vicente y las Granadinas en su transición hacia un modelo de ‘economía azul’, en donde industrias oceánicas sostenibles ayudan a proporcionar puestos de trabajo, reducir la pobreza y promover la prosperidad compartida en toda la región.
De manera específica, el proyecto:
- Apoya la implementación de políticas regionales, incluida la cartografía de activos oceánicos, el desarrollo de planes espaciales costeros y marinos, y estrategias oceánicas nacionales con la participación activa de la ciudadanía;
- Colabora con empresas tecnológicas del sector privado y plataformas educativas para promover la educación oceánica; y
- Mejora la cobertura y el acceso a datos marinos por parte de la OECS a través de plataformas colaborativas público-privadas.
Este proyecto está financiado por una subvención de US$6.3 millones del Fondo para el Medio Ambiente Mundial (FMAM).