La Oficina Regional de Educación para América Latina y el Caribe (OREALC/UNESCO Santiago), ha emanado el 13 de abril de 2020 un breve documento orientativo para contribuir a la respuesta integral de los países de la América Latina y el Caribe para enfrentar la interrupción de clases y las etapas posteriores a la emergencia educativa producida por la pandemia del COVID-19.
Las recomendaciones se relacionan con la comunicación efectiva; la coordinación y cooperación; la planificación del retorno a clases; los abordajes interdisciplinarios y el apoyo a las familias; el apoyo al personal educativo y el fortalecimiento de sus capacidades para el trabajo a distancia; las TIC (con y sin internet) al servicio de la continuidad del aprendizaje; la entrega del contenido curricular esencial y equilibrado; y abordajes flexibles e innovadores del calendario escolar.
Entre las medidas sugeridas, la UNESCO enfatiza que el profesorado y sus organizaciones deben estar involucrados en las medidas de emergencia; que se deben prever inversiones para mejorar las instalaciones hidrosanitarias en los establecimientos educativos para contener las reinfecciones en el retorno a clases y que se deben impulsar programas educativos de atención prioritaria para poblaciones en situación de desventaja acumulada.
Asimismo, la agencia especializada de Naciones Unidas llama, entre muchos otros puntos, a dar certeza sobre la estabilidad laboral y salarios del personal educativo, especialmente quienes cuentan con contratos temporales, de substitución, por hora, entre otras modalidades contractuales de tiempo parcial. Adicionalmente, llama a flexibilizar el calendario escolar buscando garantizar el bienestar y los procesos de enseñanza y aprendizaje, entre otras medidas.
Estos lineamientos son entregados en un marco global en el cual el 91,4% de la población estudiantil del mundo (aproximadamente 1.500 millones de niños, niñas y jóvenes) han sido afectados por el cierre de escuelas en más de 180 países, y donde casi todos los países de América Latina han debido enfrentar cierres de escuelas y cuarentenas parciales y totales.
Esta información está disponible en una plataforma regional en el sitio web de la Oficina Regional de Educación para América Latina y el Caribe (OREALC/UNESCO Santiago) donde se acopia información sobre el impacto del COVID-19 en los sistemas educativos de la región, trabajo que cuenta con la colaboración del Grupo Regional de Educación de América Latina y el Caribe, coordinado por UNICEF y Save The Children. La información está disponible en: https://es.unesco.org/fieldoffice/santiago/covid-19-education-alc