Mientras el mundo está en la cúspide de la transformación digital, cerca de la mitad de los 198 países no cuenta con una estrategia para mejorar las habilidades digitales, lo que impide una transformación digital eficiente e implica una mayor inversión en su desarrollo en el sector público.
Respondiendo a los desafíos en la capacidad digital de los gobiernos
La Inteligencia Artificial está en el seno de algunos de los desafíos y oportunidades socioeconómicas más importantes del siglo XXI. La pregunta es ¿cómo pueden los gobiernos equiparse de las competencias necesarias para adaptar sus visiones, misiones y estrategias nacionales en la era digital? El desarrollo de competencias digitales es una de las principales prioridades de muchos gobiernos a nivel mundial. Con el desarrollo y el uso acelerados de las tecnologías digitales, es muy importante desarrollar no solo la experiencia técnica, sino también adaptar las prácticas culturales, organizativas y de gestión que fomentan la experimentación, la iteración y la innovación en el sector público.
“De hecho, debido a que los funcionarios públicos diseñan e implementan políticas públicas, deben comprender y ser capaces de aprovechar el potencial de la inteligencia y los datos artificiales. En otras palabras, deben capacitarse para transformar digitalmente las instituciones, comprender lo concerniente a la recopilación de datos y proponer políticas que aprovechen las oportunidades que ofrecen las nuevas tecnologías, mientras navegan los diversos riesgos y desafíos que estas pueden conllevar”.
AUDREY AZOULAY, DIRECTORA GENERAL DE UNESCO
Explorando diferentes caminos de aprendizaje hacia la transformación digital
Los funcionarios públicos no necesitan convertirse en expertos técnicos. Por el contrario, deben comprender las nuevas tendencias tecnológicas y desarrollar una comprensión básica de las implicaciones sociales de las tecnologías para conducir las iniciativas de transformación digital y gobernanza. La planificación y el diseño digitales, el uso y la gobernanza de los datos, la gestión y la ejecución digitales son tres ámbitos de competencia esenciales que los funcionarios públicos deben adquirir en función de las necesidades de transformación digital de sus países. Dentro de estos ámbitos se encuentran competencias tales como la formulación de políticas basadas en datos, el respeto de los marcos legales, éticos y regulatorios y la ejecución ágil, que empoderan a los funcionarios públicos para adaptar y desarrollar estrategias digitales y planes de acción para la implementación confiable, inclusiva y centrada en los derechos humanos de la tecnología de IA.
“La base de una buena formulación de políticas -recopilar datos, formar una base de evidencia, pronosticar resultados y analizar diferentes soluciones- se superpone directamente con lo que realiza la IA. El desafío y la oportunidad están directamente alineados”.
PEKKA LUNDMARK, PRESIDENTE Y CEO DE NOKIA