El sector de las ‘startups’ tecnológicas que crecen en estos ‘tech labs’ consiguió atraer más 1.000 millones de inversiones en 2018. La unión de los dos principales centros tecnológicos del continente sorprende a un ecosistema que cuenta con más de 600 espacios.
La noticia que mejor plasma esta situación se produjo hace escasas semanas: el CoCreation Hub, un histórico tech lab de Lagos, ha adquirido iHub, el referente keniano de los espacios de innovación de África Oriental. Nace, así, un gigante de la innovación tecnológica en África, por la capacidad creativa que ambos han mostrado hasta el momento, pero también por su capacidad para atraer inversiones internacionales.
Cifras
El dinamismo y el potencial de estos centros surgidos hasta en las ciudades más imprevisibles de África, no ha dejado indiferentes a los principales actores de mundos diferentes, desde la economía hasta el desarrollo, pasando por el propio sector tecnológico. El Banco Mundial llevó a cabo un considerable esfuerzo por mapear estos centros de innovación hasta 2016. Ese mismo año, Mark Zuckerberg, en una gira por África, visitó los espacios de innovación más dinámicos y prestigiosos del continente.
El GSMA, la patronal de las operadoras de telefonía móvil, ha tomado el relevo del Banco Mundial en el recuento de centros de innovación. Son sus datos, los que ponen de manifiesto un impresionante ritmo de expansión. En septiembre de 2015, el Banco Mundial contabilizó 120 de estos centros; en julio de 2016, ya el GSMA identificó 314, eso sí con un concepto de centro de innovación algo más amplio; se habían convertido en 442 en 2018; y en el último estudio de la iniciativa, la cifra ha aumentado hasta los 618.
Aunque no se puede hablar de un modelo único. Las características de cada uno de ellos son diferentes. En este repertorio hay incubadoras de empresas tecnológicas con una enorme capacidad de movilizar fondos y con una gran eficacia en le desarrollo de las startups, pero también hay simples espacios de trabajo compartidos, fablabs, hacker spaces o maker spaces, en general. Más allá de la creación de empresas, el papel de los tech lab es fundamental en la extensión de la cultura digital e incluso en el activismo, por la voluntad de transformación social que ha caracterizado las experiencias más veteranas.
Inversiones
La multiplicación de los centros de innovación y también de los proyectos de empresas innovadoras tiene que ver con los fondos que se están movilizando para la startups africanas. Precisamente algunos de esos espacios de innovación pioneros han sido capaces de convencer a los inversores del potencial de los emprendedores que albergaban y han desencadenado una dinámica que ha funcionado con un efecto bola de nieve, la llegada de más inversores ha sacado a la luz más ideas innovadoras que han atraído más capital.
Es complicado precisar cuál es la cantidad total de inversión que reciben las startups tecnológicas africanas, pero uno de los indicadores más fiables es el análisis que desde hace años realiza la consultora Partech. Su informe más reciente, señala que durante el año 2018 las startups tecnológicas africanas atrajeron 1.136 millones de dolares de diferentes tipos de fondos de inversión, lo que supone un incremento del 108% respecto al año anterior. Teniendo en cuenta que de 2016 a 2017 la cantidad había aumentado un 53%, de 367 millones a 560 millones de dólares, se observa la magnitud real del aumento de interés de los inversores, por una empresas que, en general, se incuban y se aceleran en los espacios de innovación.
Pilares de un fenómeno
Tanto el CoCreation Hub como el iHub son dos de los pilares del fenómeno de los espacios de innovación; de los pioneros de esta fórmula; de los más prestigiosos; de los que han alumbrado más iniciativas de impacto social en sus países; y de los que han demostrado que la innovación tecnológica podía ser una vía de desarrollo y de transformación. Ambas empresas nacieron cuando muy pocos creían en el potencial de la tecnología en África, como una apuesta arriesgada pero decidida y fueron abriendo un camino, junto a otros, para la vulgarización de las TIC pero también para el éxito de proyectos con gestión empresarial. A finales del mes de septiembre el centro nigeriano adquiría el espacio de innovación keniano.
El director ejecutivo de CcHub, ‘Bosun Tijani explica que con esta operación, cuyo coste no ha trascendido, pretenden “crear una red panafricana de recursos y apoyo para nuevas empresas y emprendedores tecnológicos”. La apuesta es intencionadamente elevada, según el cofundador del CcHub: “Hemos querido reunir dos de los centros de innovación más grandes de África para que la unión implique mejorar la tasa de éxito de miles de nuevas empresas tecnológicas en todo el continente, a medida que aprovechamos los recursos y los conocimientos para ayudar a construir y escalar las empresas”.
En sus explicaciones, Tijani no traiciona el espíritu social de centro que creo hace ocho años y considera que la nueva estructura facilitará el aumento del “trabajo con grandes corporaciones y gobiernos para aplicar la tecnología dentro del contexto para abordar algunos de los problemas empresariales y sociales más apremiantes en África”.
Antecedentes
No es la primera ocasión en la que se producen acuerdos y alianzas entre estos centros de innovación, que han colaborado habitualmente en proyectos concretos y han tejido redes como AfriLabs que reúne a 158 labs en 45 países. Algunos de ellos, han mostrado su voluntad de expandirse abriendo sedes en diferentes países, como Jokkolabs, que desde Dakar está presente en ocho países, incluído Francia, además de siete africanos; o el propio CcHub que hace solo unos meses abrió en Kigali, la capital ruandesa, el Design Lab.
Sin embargo, sí que es la primera vez que uno de estos espacios compra completamente otro. ‘Bosun Tijani considera que la estructura que surgirá de esta unión posicionará en mejor lugar el sector tecnológico africano: “La infraestructura y la colaboración, más allá de las fronteras, catalizarán el ámbito de la innovación de África. Considero que la gente de todo el mundo ya se está tomando en serio la escena tecnológica africana, pero queremos consolidarlo, construir negocios que conduzcan a la creación de empleos en masa y que contribuyan a la economía en general”.
La adquisición, sin embargo, no acabará con cada una de las dos marcas que mantendrán una independencia aparente. Según han explicado oficialmente fuentes de las compañías, se mantendrán los nombres de los dos centros, ‘Bosun Tijani será el director ejecutivo de la estructura bajo la que están los dos espacios y Nekesa Were continuará siendo la directora general del iHub keniano. Tijani cree que la unión de estos dos referentes de la innovación en África puede inaugurar una nueva dinámica. “Aún no hemos visto muchas fusiones en nuestro ecosistema, por lo que la unión de CcHUB y iHub puede ser una fuente de inspiración si muestra las oportunidades que pueden producir las asociaciones estratégicas para ampliar el papel del sector de la ciencia y la tecnología en todo el continente”, advierte el emprendedor nigeriano.
A pesar de esa posible deriva hacia la concentración, Tijani considera que el actual panorama de expansión de los espacios de innovación es un reflejo de la realidad: “Es esencial que tengamos una variedad de aceleradores y centros de innovación, que reflejen la naturaleza diversa de las empresas tecnológicas del continente. Los inversores buscan cimientos sólidos, empresas que puedan escalar y tener proyección. No se trata tanto de los centros de innovación, aunque son el principal canal para conectar las nuevas empresas con los inversores en una etapa temprana, sino de las empresas que salen de ellos”.
Mark Zuckerberg, de vista en 2016
Al conocerse la noticia de la adquisición del iHub por parte del CcHub ha sido inevitable que algunos analistas colocasen en la ecuación a Facebook o que, al menos, el nombre del gigante tecnológico apareciese en las informaciones y se alimentase el fantasma de una concentración excluyente. No en vano, desde que en 2016, Mark Zuckerberg visitó Nigeria e hizo su primera parada en el espacio de innovación de Lagos, la relación del CcHub y la empresa de la más popular red social del globo se han ido estrechando, incluida la colaboración en un programa especial de aceleración de empresas tecnológicas. Sin embargo, preguntado por si las colaboraciones de Facebook y CcHub tienen algo que ver con esta operación de concentración, ‘Bosun Tijani se apresura a responder de manera simple y categórica: “No, son actividades separadas”.
La fusión de las dos compañías desplaza el centro tecnológico africano hacia Lagos. COn matices. “Evidentemente es un punto central y fundamental como parte del motor tecnológico africano, pero en el continente hay 54 estados y más de 1.000 millones de habitantes. Tenemos capacidad para tener muchos, muchos motores”, sentencia ‘Bosun Tijani.
Este artículo fue publicado originalmente en World Economic Forum. Lea el original.